Las tecnologías verdes engloban técnicas, métodos e innovaciones cuyo objetivo es mejorar y aumentar la calidad de vida humana sin dañar al medio ambiente. Muchas de estas ofrecen una alternativa a las tecnologías actuales, con el plus de mitigar considerablemente el impacto ecológico y la emisión de residuos.
En los últimos años, varias de estas innovaciones se han incorporado al sector inmobiliario, y cada vez hay más demanda de estas en los hogares. Lo que resulta interesante es que en varias ocasiones estas tecnologías ofrecen un uso de energía más eficiente, lo que reduce costos para los clientes y usuarios de una vivienda.
Cuando se habla del uso de tecnologías verdes en el sector inmobiliario es sumamente importante resaltar la presencia de la Certificación LEED. Esta es una certificación internacional que cada vez está ganando mayor importancia en América Latina, y que evalúa el nivel de sostenibilidad de proyectos inmobiliarios. La evaluación es completa: no se trata de simplemente confirmar si es que el edificio cuenta con algunas tecnologías verdes implementadas, sino que busca que estas estén incorporadas desde la concepción del proyecto y formen parte de su identidad.
Debido al creciente interés por el desarrollo sostenible como iniciativa de gobierno, las municipalidades y ayuntamientos suelen brindarle facilidades y beneficios a proyectos que logren la certificación, como por ejemplo mayor cantidad de pisos vs el promedio de una zona.
A continuación, te mencionamos cuatro de las tecnologías utilizadas con mayor frecuencia en el sector inmobiliario:
Cada vez es más común encontrar edificios que están utilizando energía solar para una variedad de usos. Algunos ya han implementado esta nueva tecnología con éxito: se recoge energía solar mediante paneles y se utiliza en vez de electricidad para muchos usos. Los más comunes son la iluminación y también la calefacción. Si bien a veces utilizar energía solar en todo el inmueble es complicado, su aplicación puede ser más acotada, como por ejemplo para la iluminación de espacios comunes, que usualmente cuenta también con otras tecnologías para el ahorro, como sensores de movimiento.
Por otro lado, la calefacción solar es una realidad. La mayoría de termas, estufas y otros mecanismos tradicionales para calentar el agua u ambientes utilizan principalmente gas o electricidad, lo que las vuelve particularmente costosas. Sin embargo, algunos edificios han comenzado a implementar paneles solares ubicados en los techos y terrazas. Su energía puede utilizarse para alimentar estos calentadores y así generar ahorros considerables en materia de energía.
Actualmente, existen calentadores solares que poseen amplias capacidades para alimentar edificios enteros, y pueden llegar a una buena temperatura.
El filtro de agua permite beber cómodamente el agua directamente de un caño. Si bien esto es común en ciertos países, en otros el agua no viene pura, y beber directamente del caño supone un peligro para la salud. Un filtro de agua en cambio elimina ese riesgo, y además supone un potencial ahorro al no necesitar que se compre agua de mesa frecuentemente.
Los filtros no son muy difíciles de instalar, y sin duda son un gran plus para todos los residentes del inmueble. Adicional a la implementación de estos filtros, otra tecnología bastante frecuente es el uso de sistemas para capturar y reciclar aguas fluviales. En algunas ciudades de América Latina las lluvias son sumamente frecuentes, y aquello representa también una oportunidad interesante para el reciclaje. Estos sistemas logran atrapar y procesar el agua de lluvia, que luego es filtrada y reutilizada para otros servicios como lavanderías, sanitarios, etc., lo que genera un ahorro de agua recurrente.
Si bien no es exactamente una nueva tecnología, la implementación de jardines en las azoteas y últimos pisos de los edificios es un mecanismo innovador que cumple varios objetivos. Primero, las plantas logran absorber bastante de la energía solar que recibe el edificio, lo que se traduce en una menor temperatura general, sobre todo en los pisos superiores.
Además, estos jardines se convierten en gratos espacios para actividades sociales o recreativas, y son altamente valorados, sobre todo si es que no hay parques cercanos.
En los últimos años se ha visto un mayor interés de parte tanto de desarrolladoras como de clientes por adquirir inmuebles y proyectos con tecnologías verdes. Por un lado, las constructoras están enfatizando bastante los beneficios de estas tecnologías en su publicidad, y por otro, los usuarios, particularmente del Nivel Socioeconómico A y B, están cada vez más interesados en estas tecnologías y sus beneficios.
Por ello, si eres un agente inmobiliario y tienes propiedades equipadas con tecnología verde, ponle más énfasis en tu publicidad para así obtener más prospectos.