Hoy en día es común preguntarte sobre las ventajas y desventajas de contratar a un agente inmobiliario. Un agente cobra usualmente entre 3% y 5% del precio de venta final como comisión, o una mensualidad en el caso de actuar como intermediador en proceso de alquiler de un inmueble. Ante ello, algunas personas prefieren avanzar por su propia cuenta y cargar sólas con todo el proceso. Sin embargo, la participación de un agente inmobiliario puede verse como más que la suma de sus partes individuales: es un profesional que te brindará un servicio personalizado y te ayudará a vender tu inmueble de forma más rápida, segura y eficiente. Aquí Valia te trae las 3 principales razones sobre por qué contratar un agente inmobiliario:
Los agentes están en constante contacto no sólo con potenciales compradores y vendedores, sino también con otros agentes. Por ello, están bastante actualizados en lo que refiere a lo que busca y lo que ofrece el mercado; y esa es una información que dificilmente podrás encontrar en algún otro lugar. Esto es clave para poder encontrar la mejor manera de colocar tu inmueble en el mercado, lo cual te permitirá:
Si bien ahora puedes utilizar recursos digitales, como Valia, para tener una lectura rápida y accesible del mercado y del valor de tu inmueble, consultar con un experto siempre ayudará a sacarle mayor provecho a esta información para tomar una mejor decisión.
Como lo mencionamos anteriormente, los agentes cuentan con una amplia red de contactos en todos los sectores involucrados con la compra, venta y alquiler de inmuebles. Así, están al tanto también de posibles personas interesadas en tu inmueble, y pueden llevarte a hacer match con personas que quizás no habrías podido contactar por métodos tradicionales.
Además, los agentes inmobiliarios también pueden realizar por ti todas las diligencias necesarias para evaluar a un posible arrendador o comprador, como por ejemplo, consultar el historial crediticio o corroborar la capacidad de pago de un postor. Esto es importante para filtrar candidatos: uno de los peores escenarios que puedes tener es avanzar el proceso de venta o alquiler de tu inmueble y excluir a otros candidatos, para luego enterarte que tu posible comprador no posee aún un crédito hipotecario aprobado o, peor, que tu posible arrendador tiene deudas impagas en el sistema financiero.
Por último, debido a que les es rentable, los agentes tienden a poseer una cuenta premium en portales inmobiliarios como Urbania o A Dónde Vivir, lo que les permite colocar las propiedades que suben en la sección de destacados. Esto garantiza una mayor exposición de tu vivienda, y que encuentres un comprador o un arrendador interesado mucho más rápido.
Afrontémoslo: es complicado vender o alquilar un inmueble, y más aún si lo ves como una tarea secundaria a la que le dedicas tu tiempo libre. Además, es un proceso que puede terminar siendo más extenso de lo que alguna vez planificaste.
Algunas de las tareas que involucran son:
Como puedes ver, cada una de esas tareas y actividades puede terminar consumiendo mucho tiempo. Y, quizás, si es que no posees experiencia en los procesos individuales, puede que no seas tan eficiente. Por ello, el contratar a un agente para que supervise y ejecute cada uno de estos pasos por ti, puede terminar valiendo la pena.
En Perú abunda la informalidad en todos los rubros, y el sector Inmobiliario no es diferente. Los profesionales verdaderamente comprometidas en realizar una línea de carrera en el sector inmobiliario se toman el trabajo de formarse y acreditarse ante el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento. Para ello, están obligados a tomar y aprobar cursos de formación académica y aprobar una serie de exámenes. En teoría, sólo los agentes registrados están habilitados para llevar a cabo este tipo de intermediación.
Sin embargo, varias personas no acreditadas también actúan como agentes. Aquí hay dos grandes segmentos: personas que ven su trabajo como agentes como algo netamente secundario (y que a pesar de no estar acreditados, podrían tal vez realizar bien su trabajo); o bien personas de ética dudosa. Por ello, no te arriesgues y asegúrate de contratar a uno debidamente registrado y acreditado.
Algunos agentes son parte de franquicias. Por ejemplo, aquí en Perú operan Remax, y Century 21, entre otras. Trabajar con un agente de franquicia no es muy diferente. Sin embargo, tienden a cobrar una comisión más alta 5% debido al respaldo de una red de contactos más nutrida y a que sus agentes individuales cuentan también con el respaldo de una empres altamente especializada, lo cual facilita y agiliza todo el proceso.